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Recycled Claim Standart (RCS)
La norma RCS se ha elaborado para productos que contengan al menos un 5% de material reciclado. En este contexto, todas las fases de producción deben cumplir la norma. Esto significa que todas las etapas, desde la fase de reciclado hasta que el producto llega al vendedor final, están certificadas. En el proceso de certificación RCS, los centros pertinentes de la empresa pueden someterse a la presentación de declaraciones conforme a la norma, a la recopilación de una serie de documentos de conformidad y a visitas in situ. El alcance del certificado RCS no aborda los aspectos sociales o medioambientales de la transformación y la fabricación, la calidad o el cumplimiento de la legislación.
RCS verifica la presencia y cantidad de material reciclado en el producto final. Esto se hace mediante la verificación de la cadena de entrada y la cadena de custodia por parte de un tercero. Proporciona una evaluación y verificación independientes del contenido de material reciclado declarado en los productos de forma transparente, coherente y exhaustiva. El RCS puede utilizarse como herramienta de empresa a empresa para que las empresas puedan asegurarse de que están vendiendo productos de calidad y obteniendo aquello por lo que pagan. También se utiliza para mantener una comunicación precisa y honesta con los consumidores. Esto incluye a empresas de desmotado, hilado, tejido y punto, teñido e impresión y costura.
RCS hace referencia a muchas normas, convenciones y publicaciones científicas reconocidas internacionalmente. En este contexto, utiliza la definición de contenido reciclado de la norma ISO 14021. El objetivo es ajustarse a las definiciones más ampliamente reconocidas y estrictamente válidas.
RCS es una norma voluntaria que no pretende sustituir los requisitos legales o reglamentarios de ningún país. Es responsabilidad de cada operación demostrar el cumplimiento de todas las leyes y normativas aplicables en materia de comercialización, trabajo y prácticas empresariales.
La certificación RCS sólo puede obtenerse de organismos de certificación acreditados. Las empresas pueden solicitar un certificado RCS tras realizar los preparativos necesarios y cumplir los requisitos de la norma RCS. En el proceso de preparación para la certificación, se recomienda encarecidamente obtener el apoyo de una empresa de consultoría. Aşan Consultoría ofrece un servicio integral de consultoría a las empresas en todo lo relacionado con la certificación RCS.